A diferencia del año anterior que fue muy atípico, en esta oportunidad y por las nuevas normativas decretadas por el Gobernador de Mendoza, las familias y amistades podrán disfrutar este día juntos.
Desde hace unos años este festejo se encuentra establecido en el tercer domingo de Agosto y es por eso que hoy 15 estamos celebrándolo. Las recientes flexibilizaciones del Gobierno de la Provincia nos permitirán disfrutar este día junto a las familias y amigos, pero siempre haciendo énfasis en la importancia del uso del barbijo, el distanciamiento social y el lavado frecuente de manos para seguir cuidándonos.
Con motivo de esta fecha en particular, el intendente Juan Manuel Ojeda saluda a los malargüinos en general sosteniendo que este día lo festejamos todos porque en nuestro ser siempre habitará el niño que fuimos alguna vez. Por ello deseó que cada vecino del departamento pueda tener un maravilloso día insistiendo en el cuidado personal ante la pandemia que aún no termina.
Además puntualizó que en su representación, el personal municipal estará acercando “mini festejos” a la zona rural, bajo estrictos protocolos y destacó la labor de varias personas de Malargüe que aportaron su granito de arena para que todos los infantes puedan recibir un obsequio en su día.
Cambio del nombre
Recordemos que el año anterior, el secretario Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), Gabriel Lerner propuso a todos los organismos modificar el nombre del festejo: “Proponemos dejar de decir ´día del niño´, porque queremos celebrar la diversidad de toda la niñez. Es muy importante que el estado acompañe las transformaciones culturales que estamos viviendo e impulse cambios que colaboren en visibilizar inequidades, y favorezcan prácticas más inclusivas”
“Decir niño no alcanza para representar las experiencias heterogéneas y múltiples de la niñez. Desde el Estado queremos nombrar una jornada en plural, que celebre a cada chica, chico, chique, gurí, changuito, mitai en guarani, weñi en mapudungun, y sus diversos modos de vivir esta etapa de la vida”, profundizó Lerner.
