El operativo incluyó extinciones, rescates y una aeroevacuación accionadas de manera positiva en cuanto a los tiempos de ejecución pero, aún así, las autoridades reconocieron que hay algunas cosas que pulir.
El viernes por la tarde, distintas instituciones se vieron involucradas en la simulación de accidente/incidente de aeronave en tierra que fue montado en el Aeropuerto con la presencia del personal de los servicios concurrentes -Policía, Gendarmería, Defensa Civil, hospital regional y empresas que participan en el rescate y extinción además del personal interno del aeropuerto-.
Pablo Barrera, perteneciente a la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) y jefe de servicios aeroportuarios de Malargüe, explicó que el Plan de Emergencia Aeroportuario consiste en compartir una actividad que se realiza de extinción y evacuación de personas, las cuales simulan estar lesionadas, con heridas graves e inclusive muertas.
“El simulacro es activado por la torre de control, se sigue con un plan de llamadas que las realiza el personal de plan de vuelo y a partir de ahí, la jefatura del aeropuerto toma conocimiento haciendo la convocatoria del coefijo, donde son convocadas las autoridades de las distintas instituciones intervinientes. Luego se genera el segundo COEM que coordina todas las actividades en el lugar del siniestro y es donde, por medio de una frecuencia interna, se solicitan médicos, autobombas y demás interacciones necesarias”, informó Barrera.
En cuanto a la procedencia de evacuación, el especialista indicó que después de hacer la extinción de fuego se procede a la evacuación de las víctimas que son llevadas a un lugar de triage (sistema de selección y clasificación de pacientes en los servicios de urgencia) para ser separados de acuerdo a las lesiones (críticas, menos críticas, lesiones leves, sin lesiones y muertos) y dar lugar a la evacuación de las mismas en las ambulancias disponibles para los traslados.
Destacó además el trabajo de la PSA que se encargó de hacer un vallado para que no se remueva nada del lugar y por ese lapso de tiempo el aeropuerto no puede operar. Seguidamente agradeció a todos los intervinientes por el aporte brindado.
Finalmente anticipó que las falencias ocurridas serán tratadas en reuniones para poder mejorarlas o cambiarlas en caso de ser necesario.
También habló Roque Vázquez, jefe de aeropuerto, quien reveló que este ejercicio ha sido bastante satisfactorio ya que ha sido diferente a otros en distintos aspectos como por ejemplo la presencia de la Fuerza Aérea. “Los organismos intervinientes dentro del operativo fue la esperada, correcta -en términos generales- y con algunos errores a corregir pero fue satisfactoria”, manifestó y añadió: “Podemos estar tranquilos que en una emergencia vamos a poder manejarla”.
Por su parte, Yolanda Carbajal, directora del hospital regional Malargüe felicitó al Jefe de Aeropuerto y al equipo de trabajo por las acciones realizadas. “Este tipo de simulacro nos ayuda un montón para aprender y poner en práctica a todo el equipo de salud de Malargüe. La llamada al 911 entró en tiempo y forma y pudimos activar las ambulancias y en 5 minutos ya estábamos todos acá trabajando con las demás instituciones. Tenemos muchas cosas que limar en nuestro equipo pero han trabajado muy bien y todos han estado a disposición con los llamados realizados”, afirmó la profesional.
No obstante, Andrés Oros, subcomisario de la Seccional 24º expresó que la policía trabajó externamente realizando cortes para que puedan desplazarse las ambulancias y sostuvo que la evaluación fue muy positiva porque los efectivos respondieron rápidamente.
Para terminar, Nicolás Ghiglione, en representación de Defensa Civil hizo uso de la palabra para resaltar que todo lo que tenga que ver con capacitaciones y prácticas es muy fructífero para las instituciones destacando que les permite “limar errores finos” y explicó que el personal de Defensa Civil actúa como brigadista a la hora de rescatar los accidentados y colaborar para subirlos a las ambulancias.
