Boulevard de Avenida Rufino Ortega: Una obra que refleja el trabajo de los agentes municipales

Tras una sentida remodelación, el emblemático boulevard se reabre como un testimonio de la dedicación del personal municipal y trabajo en equipo con la participación, a su vez, de la comunidad: El amor incondicional de un pueblo por su tierra. La inauguración de la remodelación del Boulevard Rufino Ortega fue un acto que no solo marcó la apertura de una obra, sino que enmarco el profundo sentimiento de quienes tejieron su historia con dedicación y amor por la ciudad. La visible emoción de las autoridades locales al agradecer a los agentes municipales que dieron continuidad a este proyecto fue el reflejo de un esfuerzo mancomunado. Esta significativa intervención urbana, anhelada por más de tres años, se hizo realidad gracias al incansable trabajo y el apoyo incondicional de los empleados municipales. Con fondos municipales y una entrega que trascendió las inclemencias del tiempo, propias de la región, el personal enfrento cada desafío con el objetivo de devolverle su esplendor a uno de los principales corredores de Malargüe. Pero el corazón de esta obra latió aún más fuerte gracias a la colaboración ejemplar de los vecinos frentistas. Su apoyo fue fundamental, brindando resguardo a materiales y herramientas, e incluso sumándose activamente a las tareas, demostrando una vez más la fuerza de la comunidad malargüina. El Ingeniero Sergio Ojeda, Director de Obras Públicas, expresó la magnitud del desafío superado con emoción: “No era necesario el daño que le hicieron sino una simple remodelación, por eso, desde el área se tomó como un desafío personal para volverlo a su funcionamiento. Llevó mucho trabajo, pero fue de la manera que se demostró la organización por medio de un proyecto y con un cuerpo de gabinete, el poder ejecutivo y sobre todo el personal municipal que apoyó en esta gran acción, se lograron estos resultados”. En este sentido, el Intendente Celso Jaque manifestó que «…es un momento de alegría y agradecimiento, en primer lugar a Dios, es quien nos permite poder ser un instrumento útil para poder trabajar para nuestros vecinos y concretar este tipo de acciones y de este tipo de obras; a los empleados municipales, que muy bien lo decía Sergio, son el alma que ha permitido trabajar con su esfuerzo, con todo lo que significa el dejar de lado muchas cosas y no siempre son bien remunerados para poder hacer estas obras que es beneficiosa para todos los vecinos. Asimismo agradecer a los locadores de servicios municipales que también le pusieron todo sus esfuerzo». Por otra parte, el jefe comunal continuó su discurso expresando en «…No dejar de lado a la familia de cada empleado, que siempre por estas obras han tenido que quitar mucho tiempo para ellos, para seguir trabajando y seguir engrandeciendo nuestro departamento…» Hoy, el Boulevard Rufino Ortega no es solo una vía más en el mapa de Malargüe; es un símbolo de resiliencia, trabajo en equipo y el amor incondicional de un pueblo por su tierra, un lugar donde cada paso ahora resuena con la historia de un esfuerzo que valió la pena.