En la actualidad, el ejercicio de los derechos como consumidores se ha convertido en una tarea crucial. Ante situaciones de maltrato, cobros indebidos o condiciones comerciales abusivas, surge la importancia del “Libro de Quejas”. Para ello, la directora de Defensa al Consumidor, Leticia Castro nos acompaña a explorar cómo esta herramienta se ha convertido en la primera línea de defensa para los consumidores y en la principal evidencia para la Oficina de Defensa al Consumidor.
Para empezar, Castro enfatizó que la gran mayoría de los comercios en Malargüe cuentan con este libro, el cual no solo es una condición obligatoria, sino también la primera herramienta de reclamo para los consumidores.
La directora subrayó que el Libro de Quejas es la primera evidencia que su oficina recibe cuando los consumidores se enfrentan a situaciones injustas en comercios locales. Ya sea por cobros indebidos, maltrato al cliente o prácticas discriminatorias, el acto de dejar constancia en este libro se convierte en el primer paso para hacer valer los derechos consagrados por la ley.
Castro detalló el proceso: “Cuando un consumidor se encuentra con una situación que va en contra de sus derechos, la primera acción es solicitar el Libro de Quejas al comercio. En caso de negativa, se debe acudir directamente a la Oficina de Defensa al Consumidor. Es imperativo que el Libro de Quejas esté ubicado en un lugar visible y de fácil acceso, sin alteraciones ni daños que impidan su uso”.
La firma del reclamo, acompañada de detalles como nombre, DNI y contacto, establece un registro cronológico en el Libro de Quejas. Además, la tecnología moderna permite a los consumidores respaldar su queja con una fotografía que, posteriormente, se envía a la oficina de Defensa al Consumidor.
Leticia Castro puntualizó que la rapidez en la acción es crucial. Una vez recibido el reclamo, la oficina realiza inspecciones, emplaza a los comercios a corregir las prácticas irregulares y, en casos graves, puede elevar infracciones a las autoridades provinciales.
Aprovechó la ocasión para advertir nuevamente a la comunidad sobre las estafas. En este sentido, la directora solicitó a los vecinos no dar datos personales ni números de tarjetas a extraños.
Ante cualquier inquietud, los interesados pueden comunicarse al 260-4814082 o bien dirigirse a las oficinas, ubicadas en el primer piso del Mall Shopping de Malargüe.